Las
indicaciones de colocación de un drenaje pleural son neumotórax (a tensión,
postraumático y postquirúrgico, yatrogénico secundario a canalización de vías
centrales, en ventilación mecánica, entre otros), hemotórax, quilotórax
derrames pleurales, empiema, y pacientes intervenidos de cirugía torácica.
¿Para qué se usan los tubos de tórax?
Los tubos torácicos son estructuras semirrígidas
y trasparentes de plástico que se insertan en el tórax para poder drenar
colecciones de líquido o aire del
espacio pleural. Permiten, a su vez, que si el pulmón está colapsado por esas
colecciones pueda reexpandirse de nuevo.
Estas
colecciones pueden ser de aire (neumotórax), líquido (derrame o hidrotórax), sangre (hemotórax), pus (empiema),
etc.
Colocación del tubo torácico:
Los
tubos de drenaje torácico los coloca y los retira el médico en colaboración con
la enfermera/o. Este procedimiento requiere una técnica estéril con anestesia
local.
El punto de inserción puede ser:
- Inserción
apical. En la parte anterior del tórax 2º - 3er espacio intercostal línea
clavicular media, cuando hay que drenar aire.
- Inserción
basal. Línea media axilar entre el 4º y el 6º espacio intercostal, cuando
hay que drenar liquido.
- Mediastino.
Debajo del esternón, después de cirugía cardiaca.
Pero,
hay que tener en cuenta que el principio básico es que el drenaje será colocado
allí donde se necesite, es decir, donde haya una colección que drenar, y, a
veces, ésta no se encuentra en los puntos anteriores de referencia.
Complicaciones
de la colocación
- Hemorragia
en el punto de inserción
- Laceración pulmonar - Colocación errónea - Infección, Neumonía, Empiema |
¿Qué ocurre cuando…?
•Una
lesión o acto quirúrgico permite la entrada de aire o liquido dentro de la
cavidad pleural.
•Se
anula esta presión negativa, disminuyendo la
fuerza succionadora de cada pulmón.
•El
tejido elástico del pulmón se retrae y el pulmón se colapsa, total o parcialmente
produciéndose:
-
Aumento del esfuerzo respiratorio.
-
Disminuye el
suministro de reserva de aire residual pulmonar.
El
drenaje pleural es una técnica que utiliza un sistema valvular que va a
permitir evacuar colecciones anómalas de aire y/o liquido del espacio pleural,
en un solo sentido, para restaurar la presión negativa en su interior.
Objetivo del drenaje pleural:
•Facilitar
la salida de líquido, sangre y/o aire del espacio pleural.
•Evitar
la entrada de aire atmosférico en el espacio pleural.
•Restaurar
la presión negativa del espacio pleural.
•Promover
la reexpansión del pulmón colapsado.
•Aliviar
la dificultad respiratoria asociada con el colapso pulmonar.
Sistemas de drenaje pleural:
Existen
varios sistemas de drenaje, pero los principales son el PleurIevac y la válvula
de HeimIich conectada a un recolector a
un sistema de vacío. Como ya hemos dicho, en el extremo del tubo de tórax
deberemos conectar un aparato que tenga una válvula unidireccional (Mecánica o
hídrica) que permita la salida pero no la entrada de aire.
Válvula hídrica = sello de agua (Pleur-evac).
Válvula mecánica = válvula de Heimlich.
El Pleur-evac no es más que un sistema de
drenaje pleural de tres cámaras. Aunque sólo veamos algo parecido a un maletín,
en verdad, es una caja con tres cámaras en su interior.
Tendremos la cámara
primera, que es la de recolección (cámara blanca), dicha cámara está
marcada con medidas para establecer la cantidad de drenaje, y es transparente
para ver las características de lo drenado. La segunda cámara, en medio y bien
pequeña, con un agua teñida de azul y un nIvel de agua de 2 cm, es la cámara
de sello de agua (cámara roja), que es la que funciona con válvula
unidireccional ,dejando salir aire pero no entrar. La tercer a cámara es la de aspiración
(cámara azul), y bien puede ser una aspiración húmeda, la columna de hasta 20
cm que burbujea al conectar la aspiración de la toma de la pared, o bien, puede
ser seca, como ocurre en los nuevos Pleur-evac en los que no hay columna de
agua y por tanto no existe ese burbujeo que puede llegar a ser tan molesta para
el paciente. En este tipo de dispositivos, existe una rueda que nos permite
regular la aspiración, mientras que en los húmedos, la controlaremos según la
cantidad de agua que echemos en la cámara de aspiración y que, generalmente
suele ser una columna de 20 cm.
CUIDADOS DE ENFERMERÍA DEL SISTEMA DE DRENAJE PLEURAL:
Todos
los días deberían revisarse las tres cámaras e indicar:
1. Cámara de recolección: valorar el débito diario; en los pacientes
postoperados a veces es preciso calcular el débito horario, valorar las
características del líquido que drena, si es sangre o seroso, y la velocidad a
la que drena. Es útil marcar con un rotulador en las propias columnas de la
cámara escribiendo la fecha.
- Volumen, velocidad y características del líquido que drena, al menos cada 24h. Si el débito fuera inferior a 100ml/24h existiría la posibilidad de retirar el drenaje, siempre que no exista fuga aérea. En nuestro caso sí que se produjo manifestándose en forma de enfisema subcutáneo. Esto tiene lugar cuando el aire penetra dentro de los tejidos bajo la piel. Generalmente ocurre en la piel que cubre la pared torácica o el cuello, pero también se puede presentar en otras partes del cuerpo.El enfisema subcutáneo puede verse a menudo como una protuberancia lisa en la piel. Cuando se palpa la piel, se produce una sensación inusual de crepitación a medida que el gas es empujado a través del tejido. Esta afección es poco común.En nuestro caso fue secundario a un neumotórax.
- Velocidad, a pesar de que no existe ninguna evidencia, una buen práctica sugiere que no debe drenarse más de1,5 litros de una vez y no debe sobrepasarse más de 300ml/h.
- La presencia de exudado sanguinolento en la cámara colectora, indica la posibilidad de se formen coágulos en el tubo de drenaje. El ordeño no es aconsejable porque crea un exceso transitorio de presión negativa e la cavidad torácica.
- Hemotórax, control horario de volumen y aspecto. Tratar de determinar si la pérdida es continua o intermitente, causada por el cambio de posición o drenaje pleural.
2. Valorar cámara de sello de agua: ver que está en su correcto nivel a 2cm. Si éste subiese
se saca ría el agua pinchando con una aguja y jeringa en el botón amarillo,
hasta obtener el nivel adecuado, lo mismo si hubiera que rellenarlo.
- Sello de agua: monitor de fugas, mirar si hay burbujeo o no. El sello de agua aporta la unidireccionalidad al sistema, aislando la cavidad torácica permitiendo el paso de aire al exterior pero no al revés.
- Columna calibrada: Indica la presión intrapleural existente. El líquido de la columna fluctúa, ascendiendo en la inspiración y descendiendo en la espiración.
- Válvula de descarga de la presión negativa elevada (manual). Localizada en la parte posterior de la cámara, permite la eliminación del exceso de presión negativa ejercida, cuando el sistema se haya conectado a succión. Esta maniobra suele ser Realizada por los cirujanos torácicos.
3. Valorar cámara de control de succión: si no se resisa lo normal es que el agua con el
burbujeo se evapore, y el nivel de la columna disminuya perdiendo efectividad
la aspiración.
El
pinzamiento de los tubos debe quedar limitado a los siguientes casos, en ningún
otro caso debe pinzarse:
- Cuando se cambie el equipo.
- Para intentar localizar una fuga aérea.
- Para valorar la retirada del tubo torácico en caso de neumotórax.
La
reflexión que he llevado a cabo de toda esta teoría tiene como finalidad, por
un lado, refrescar conocimientos a través de la lectura de los documentos de la
bibliografía, y, por otro recordarme a mí misma todos los cuidados que supone
tener pacientes con este tipo de dispositivos. Es decir, deberíamos tener
interiorizado desempeñar nuestro trabajo con más rigurosidad entendiendo que revisar y evaluar este como
muchos otros dispositivos, no significa “echar un vistazo”, sino que tendríamos
que detenernos y comprobar que, efectivamente, como he detallado con
anterioridad todo está en orden.
Finalmente
la conclusión que extraigo de esta entrada es que esta profesión lleva
intrínsecamente adherido a ella el estar constantemente refrescando y ampliando
conocimientos para evitar de esta manera que algo que podamos estar utilizando
hoy, mañana quede obsoleto y desconozcamos su alternativa. ¿Reciclarse o
anclarse?, nosotros decidimos y nuestra sanidad lo padece.
Bibliografía:
- Esteban A, Martín C. Manual de cuidados intensivos para enfermería.3ª ed. Barcelona: Springer-Verlag Ibérica; 1996.p.270-272.
- http://www.ice.udl.cat/udv/demo/24017/continguts/modulo3/m3.htm
- http://ocw.unican.es/ciencias-de-la-salud/enfermeria-clinica-i-2011/ejercicios-proyectos-y-casos-1/Actividad%206%20-%20Drenaje%20toracico.pdf
- http://www.oc.lm.ehu.es/Fundamentos/fundamentos/TecnicasCM/Tubo%20de%20torax.pdf.
Muy completo Yasmina. Me conformo con que la intención de refrescar conocimientos y ponerte al dia en drenajes pleurales haya sido conseguida.
ResponderEliminarBuen repaso, aunque tambien podias haber contado un poquitin mas de tu experiencia con la señora que llevaba el drenaje, que me ha dicho un pajarito que fue la primera vez que tocaste un enfisema subcutáneo y esas cosas, jeje.
Que malin que soy, ehh??
Alguien sabe que ha pasado con la autora? muy buenos analisis.
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